El mapamundi de Cresques o atlas catalán

Este mapamundi, fabricado aproximadamente en el año 1375 según aparece registrado en el calendario que lo acompaña, no está firmado pero su autoría se atribuye a un judío mallorquín llamado Abraham Cresques y a su hijo Jafuda. Es uno de los atlas cartográficos más importantes de la Edad Media y el primero conocido que incorpora una rosa de los vientos.

Su origen parece estar en un encargo del infante Juan, duque de Gerona, para su primo, el rey de Francia Carlos VI, a quien quería obsequiar con un atlas. Con ese fin, el 5 de noviembre de 1381 el infante Juan escribe una misiva a Abraham Cresques. Si has prestado atención, aquí tendrías que preguntarte cómo puede ser que este encargo de 1381 se trate del mismo mapamundi que hace un párrafo te hemos dicho se supone que fue realizado alrededor de 1375. Algunos estudiosos creen que el regalo se trataba de un atlas que el infante Juan ya tenía en propiedad y que lo que le proponía a Cresques era reemplazar ese mapa que iba a obsequiar con uno igual también fabricado por los Cresques. Este segundo mapa se terminaría en 1389839 y sería Jafuda Cresques el encargado de acabarlo ya que el padre murió en 1387. En cualquier caso, y a pesar de datar del siglo XIV, el también conocido como “atlas catalán” no se encontró hasta el siglo XIX.

El mapa de Cresques consiste en seis hojas dobladas por la mitad y pegadas en tablas de madera y mide 65 x 300 cm (65 x 50 cm cada hoja). Con una óptica centrada en el Mediterráneo, refleja el mundo conocido en aquel momento.

Las seis hojas: 

• Primera (cosmografía). Consiste en un resumen de los treinta días del mes lunar, un diagrama que incorpora una rosa de los vientos para calcular la marea alta durante la luna llena y otro diagrama que se cree que permitía calcular las fiestas movibles del año (Carnaval, Pascua y Pentecostés). Esta hoja también incluye una anatomía médica astrológica y una tabla para encontrar la luna en el zodíaco.

• Segunda (calendario). En esta hoja aparece un calendario solar y uno lunar rodeados por las cuatro estaciones del año, así como datos astronómicos basados en el modelo geocéntrico de Ptolomeo, además de los doce símbolos del zodíaco y las fases de la luna.

• Tercera y cuarta (Finisterre y el Mediterráneo). Comprenden todo el mundo conocido en la época desde los 10º a los 60º de latitud norte. Incluye multitud de banderas y leyendas con datos físicos, económicos y demográficos. También aparecen las treinta y dos direcciones y el nombre de los ocho vientos. En esta representación de la rosa de los vientos, la estrella polar se simboliza con una figura semejante a una menorah (el candelabro sagrado judío) en lugar de la clásica cruz latina. Esta particular forma de representar la estrella polar parece ser una marca personal del trabajo de los Cresques.

• Quinta (mapa de Delli). Este mapa se inicia con el curso bajo del río Volga y sus desembocaduras en el mar Caspio. Destacan las ciudades de la Meca, Bagdad, Samarcanda y Astracán, que son las respectivas rutas sur, central y norte hacia Pekín.

• Sexta (mapa de Catai). Aquí se compensa la falta de información con una rica ornamentación y las ciudades más importantes que aparecen son Chanbalech y la ciudad del Gran Kan (hoy Pekín). En el océano Índico se representan las islas de Iana (probablemente la Java actual) y Trapobana (Ceilán). Además se menciona la existencia de 4.548 islas más.

Tanto si eres un amante de la cartografía como si lo único que te gusta son los puzzles, las ornamentadas tres mil piezas del mapamundi de Cresques no solo te garantizan muchas horas de entretenimiento sino que además te trasladarán a un mundo donde aún había tierra por descubrir. ¡Puzzle a babor!