Antes de ir al meollo de la cuestión y contarte por qué esta escultura carece de extremidades superiores, pongámonos en antecedentes.
¿Cómo es la Venus de Milo?
La Venus de Milo fue creada alrededor del siglo II a.C. Está construida en mármol, mide más de 2 metros y pesa unos 900 kilos. Representa a Afrodita, la diosa griega del amor y la belleza. Su autor es anónimo aunque algunos estudios han adjudicado su creación a Praxíteles. Esta impresionante escultura es considerada una de las más importantes y hermosas obras del arte griego clásico.
¿Por qué se llama “Venus de Milo”?
Se llama Venus de Milo porque fue encontrada en el siglo XIX en la isla de Melos, también denominada Milo. La estatua fue descubierta por casualidad por un campesino, un pastor llamado Yourgos, mientras trabajaba en la tierra. Yourgos se sintió profundamente obnubilado por la belleza de la obra y decidió llevársela a su casa y guardarla en su establo. Tanto le gustaba su Venus que durante bastante tiempo rechazó muchas ofertas de compra.
¿Qué pasó con ella?
Un oficial francés, Jules Dumont D’Urville, durante una expedición por las islas del Mediterráneo, topó por casualidad con el establo del pastor Yourgos. El oficial Dumont, que era un hombre culto e instruido, fue inmediatamente consciente del valor incalculable de esta obra clásica. Intentó negociar con el pastor, que seguía en sus trece de no querer deshacerse de su preciada Venus. Dumont se empeñó en llevarse a Francia la Venus, prometió al pastor una suculenta suma de dinero y fue a pedir apoyo a la embajada francesa en Constantinopla para que ratificara la venta. Pero parece que, entre tanto, Yourgos habría estado negociando su venta por otro lado con unos turcos que querían regalársela a su gobernador. Cuando el oficial francés regresó de buscar ayuda en la embajada, se encontró con que la estatua estaba embalada y lista para su traslado, pero no para él sino para los turcos. Dumont, recordó al pastor el acuerdo al que habían llegado y le mostró todo el dinero, al verlo todo junto, cerró el trato con el francés y le otorgó la estatua.
Mientras Dumont y los suyos se dirigían a su barco —con la Venus a cuestas— para embarcar y regresar a Francia, se encontraron con los turcos que no estaban para nada de acuerdo con cómo se había resuelto la venta, y que seguían empeñados en que la Venus tenía que ser para ellos. Así que se pusieron a luchar los unos con los otros y, los que ganasen, se convertirían en los propietarios de la bella escultura.
Y entonces… ¿por qué la Venus no tiene brazos?
Finalmente ganaron los franceses, pero no fueron los únicos que salieron magullados de la reyerta. La venus se llevó unos cuantos zarandeos, y se dice que fue en un golpe cuando perdió los brazos.
La Venus fue trasladada a Francia. Pero sin embargo sus brazos aún continúan en paradero desconocido. Hay opiniones que indican que podrían encontrarse enterrados en las profundidades marinas. Lo que sí se conoce es que probablemente en la mano de uno de los dos brazos sostendría una manzana, pero no una manzana cualquiera, sino la manzana dorada, que simbolizaría la belleza suprema que la identificaría como la diosa griega más bella.
Otras teorías sobre la pérdida de los brazos
Existen otras teorías sobre la ausencia de brazos de esta escultura:
Una de ellas es un poco más profunda y trataría de expresar que la belleza no ha de ser únicamente física, sino también espiritual, y que una persona puede ser muy bella, pero si carece de otras habilidades su belleza no servirá de nada. Por tanto, según esta teoría, la Venus nunca tuvo brazos.
También se dice que Afrodita tenía la capacidad de enamorar a cuantos señalase con el dedo. Al amputarle los brazos, perdería esa capacidad sobrenatural.
La otra explicación es que el autor habría dejado los brazos para lo último, y cuando ya tenía terminada la obra, a falta de añadir las dos extremidades superiores, decidió descansar y visitar a su amada, quien le asfixió entre sus pechos.
¿Cuál será la verdad? Nunca lo sabremos, pero el misterio que se esconde en esta escultura hace que sea, si cabe, aún más bella y enigmática.
Actualmente puedes visitar a la Venus de Milo en el museo del Louvre de París. O también puedes construir su torso con este genial puzzle en 3D.
Muy interesante
muy interesante la historia pero me quedo con la primera historia yo en mi hogar tengo una de 45 cm y la cuido mucho porque yo la compre en bruto la prepare y la pinte es de una escultura de yeso me encanta