La vuelta de las vacaciones es un momento agridulce. Por un lado volvemos a casa habiendo descansado, desconectado y disfrutado. Además regresamos con la piel dorada por el sol o sonrosada por la montaña. Pero también es un momento duro, ya que volvemos a enfrentarnos con la realidad y la rutina. Hay quienes prefieren volver a sus quehaceres, a sus amigos, a sus costumbres y aprovechan que están descansados y con las pilas cargadas para coger impulso y comenzar con fuerza el nuevo periodo. Sin embargo, hay ocasiones en las que esa vuelta a la realidad se torna demasiado dura, compleja y nos vemos inmersos en lo que se denomina “síndrome postvacacional” una suerte de desidia, tristeza y apatía que nos invade y que produce en nosotros una gran negatividad y nos impide ver las oportunidades que la vuelta a la rutina nos concede.
Como no queremos que ninguno de vosotros resulte poseído por esa sensación tan fea y desagradable, vamos a desvelaros algunos trucos y a hacer juntos el ejercicio de ser positivos y ver el horizonte lleno de luz. Acabemos de una vez por todas con el síndrome postvacacional ¡con ayuda de los puzles!:
- TRAZA METAS Y CONSTRUYE OBJETIVOS. Enhorabuena, si has acabado tus vacaciones estivales te encuentras en un momento de finalización y comienzo (todo a la vez). Es una inmejorable oportunidad para fijar objetivos de cara al nuevo “curso”. Usemos este tiempo para reflexionar sobre lo que queremos hacer, sobre lo que queremos desechar, sobre lo que queremos retomar y sobre lo que deseamos emprender. Comienza por cosas sencillas y ve poco a poco aumentando la dificultad de tus metas. Así podrás alcanzar logros sencillos que te motivarán para conseguir los grandes. ¿Por qué no tener como meta la construcción de un puzzle? Mientras lo consigues podrás ir pensando en los objetivos más complejos. Es importante que no solo centres los objetivos en tu trabajo.
- TEN UNA AFICIÓN PARA DIVERTIRTE Y SUPERAR LA NEGATIVIDAD. Ya hemos hablado de los efectos tan beneficiosos que tienen los hobbies en nosotros, así que no hay nada mejor que tener una afición para relajarte y mantener la mente ocupada (y no pre-ocupada) con algo que nos proporciona sensaciones agradables y placenteras. Los puzzles son, sin duda, un estupenda actividad de ocio.
- PASA TIEMPO CON TU FAMILIA. Estos días de vacaciones has pasado mucho tiempo con tu pareja, hijos, amigos, seres queridos… y una de los pesares que nos acecha en esta etapa es la sensación de que, debido al trabajo y a las obligaciones, tendremos menos oportunidades de disfrutar de la compañía de los nuestros. Crea momentos de calidad con tus seres queridos. Proponer montar un puzzle en familia es un fantástico plan para disfrutar juntos, divertiros, motivaros y compartir un reto común.
- MOTÍVATE, ELIGE NUEVOS DESTINOS DE FUTUROS VIAJES. Piensa dónde te gustaría ir el verano que viene o en tus próximas vacaciones: ¿playa, montaña, alguna ciudad que te encantaría visitar, antiguas civilizaciones…? Puedes pensar en ese destino deseado y conocer más sobre él construyendo un rompecabezas con sus estampas evocadoras.
- ALEJA LOS PENSAMIENTOS NEGATIVOS. Hay muchas formas de meditar, el caso es poner nuestra energía y pensamientos en el momento presente, siendo conscientes plenamente de lo que estamos haciendo aquí y ahora. Hay multitud de técnicas de meditación, algunas de las más activas son pintar mandalas y también construir rompecabezas. Es la mejor opción para dejar pasar los pensamientos negativos.
- HUYE DE LA RUTINA. Haz algo que no hayas hecho nunca. Atreverte con más de mil piezas o un reto en 3D, por ejemplo, puede resultar apasionante y novedoso.
- CONCÉDETE UN CAPRICHO, DATE UN PREMIO POR LAS COSAS BIEN HECHAS. Prémiate cuando consigas cosas complejas, darse un caprichito y mimarse de vez en cuando nos reconfortará y hará que nos sintamos mejor. Cada vez que logres terminar una parte complicada de un puzzle o cuando finalices uno completo, concédete un premio.
- ASEGÚRATE DE TENER MOMENTOS DE OCIO, ASÍ TENDRÁS TUS PEQUEÑOS RATOS DE MINIVACACIONES. Tu agenda no puede estar repleta de obligaciones y quehaceres, es importante establecer momentos de descanso y de ocio cada día y los fines de semana o días libres aún más. De esta forma no tendremos tantísima dependencia de las vacaciones. Puedes dedicar esos ratitos libres a actividades relajantes y liberadoras.
- DESARROLLA LA PACIENCIA. Así serás más resistente a la negatividad, porque sabrás que todo pasa y todo llega. Una buena manera de ejercitar la paciencia es con los puzzles, ya que tendrás que ir poco a poco viendo las piezas que encajas. En esta actividad no cabe el nerviosismo y la velocidad, hay que ir con calma y pasito a pasito.
- SONRÍE MUCHO. La risa es el mejor antídoto contra el mal rollo, la negatividad y la apatía. Desde Puzzlepassion te aseguramos que unir piezas proporciona muy buenos ratos que nos arrancaran sonrisas a tutiplén 🙂
me encanta esta idea. hacer puzzles es muy relajante